Muere Carlos Menem, excéntrico presidente argentino: mujeriego, populista, capitalista y corrupto

Carlos Menem, quien fuera presidente de Argentina durante gran parte de la década de 1990, murió este domingo a los 90 años. Menem había estado internado desde hace dos meses en el sanatorio Los Arcos, en Buenos Aires, por una infección urinaria.

Anteriormente, el expresidente argentino, que dirigió el destino de su país entre 1989 y 1999, también había pasado un par de semanas en el Instituto del Diagnóstico y Tratamiento, por una neumonía bilateral.

El pasado 13 de junio de 2020 un equipo médico le diagnosticó una neumonía severa, que en las últimas semanas empeoró debido a la diabetes que también padecía.

Uno de sus rasgos más característicos cuando era presidente eran sus patillas, prolongadas por las mejillas, mitad blancas mitad negras, crespas y pobladas. Las llevaba para imitar a su caudillo favorito, el prócer Facundo Quiroga, y eran emparejadas a diario por un peluquero que llegó a tener asiento fijo en el avión presidencial.

  • Frondosas, excéntricas, exageradas, se puede decir que las patillas del exmandatario argentino Carlos Saúl Menem fueron un reflejo de su carácter extraordinario, un carácter que materializó por una década, la de 1990, el sueño argentino de vivir en el mejor de los mundos: el más divertido, el más auténtico, el más pomposo.

Oriundo del lejano noroeste del país, La Rioja, en 1995 Menem se convirtió en el primer presidente en ser reelegido en 50 años.

En su primer gobierno forjó un boom económico; en el segundo, una crisis traumática.

Abogado, gobernador y senador, el riojano estuvo dos veces preso durante los regímenes militares de los años 70 y 80 y fue dos veces condenado por casos de corrupción y tráfico de armas. Evitó la cárcel por la inmunidad parlamentaria y, en los últimos años, fue absuelto.

Le decían «el turco», en referencia a sus raíces sirio-libanesas, raíces que definieron su familia, su personalidad e incluso su vida privada, tantas veces protagonista de la prensa sensacionalista.

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