El chofer que transportó unos misioneros a Haití y que habría sido secuestrado, tuvo que caminar 520 kilómetros que es la distancia que hay de Elías Piña a Dajabón, lugar donde llegó a bordo de un motoconcho tras permanecer 10 días engrillado y en manos de sus captores.

“Estuve engrillado, y en un momento en que me flojaron los grillos, y atendiendo un descuido de los hombres que me secuestraron, logré escapar corriendo por los montes”, así narró Kairon tras ser cuestionado en una oficina en Dajabón.

La primera versión es que por el rescate de Kairon Antonio Alvarez se pedía la suma de US$50 mil y luego, es el propio “secuestrado” que dice que pedían esa cantidad para entregar el autobús donde transportó a los misioneros.

El chofer narró que sus secuestradores lo llevaron a Cabo Haitiano, cuya distancia hasta Dajabón son 67.3 kilómetros.

Según Peralta Arias, llegó hasta la frontera entre Juana Méndez y Dajabón, en un motoconcho, y se presentó a las autoridades que de inmediato los organismos de inteligencia y seguridad del Estado en el edificio de Aduanas en la población fronteriza, iniciaron los interrogatorios.

Según un vídeo presentado por la Policía, el chofer, llorando, dijo que lo mantuvieron secuestrado, encañonado, en una comunidad de Cabo Haitiano, donde dijo que la noche del jueves comenzó a llover lo que según él, provocó el descuido de los que lo vigilaban, y que eso le permitió que lograra escapar “corriendo por los montes”.

Kairon, confesó que unas cuatro personas lo retenían en contra de su voluntad y pidiendo un rescate de US$50 mil “viví momentos de tensión y terror debido a que a cada instante le ponían pistolas en la cabeza y amenazaban con matarme”. “Me tenían con grilletes y debido a la hinchazón que le provocaron los grilletes en ambas piernas, decidieron quitármelos, y logré escapar, gracias a que anoche cayó un torrencial aguacero”