Por Miguel Ángel Cid Cid

El gobierno avanza en la construcción del muro fronterizo para llevar la división de la isla a una nueva dimensión. El Espacio de Comunicación Insular, por el contrario, se aleja de esos objetivos. En su cumpleaños diecisiete inició la ampliación de puentes comunicantes y unificadores para elevarlos por encima de dicho muro divisorio.

Los que conocen el portal “espacinsular” en las redes, pueden creer –y algunos hasta afirmar– que es un periódico digital igual al común. Esa versión es falsa. El Espacio de Comunicación Insular es una ONG que tiene como objetivo principal crear puentes de comunicación entre las personas. Y muy en especial, comunicación entre los que habitan la isla de Quisqueya, la parte Este y la Oeste.

El Espacio de Comunicación Insular, igual que otras organizaciones, tiene un portal web: http://espacinsular.org/. En él la información es variada. Puede, inclusive, que un cibernauta lea una noticia tomada de otro medio. Si el que lee es un asiduo de espacinsular sabe que sus reportes son seleccionados con la intención expresa de comunicar apegados a la verdad. En el mes de agosto recién pasado cumplieron diecisiete años en esa difícil tarea.

Otro de los propósitos consiste en ser “una institución de comunicación comprometida con la promoción y el fortalecimiento de las relaciones políticas, sociales, económicas, y culturales entre los dos pueblos, República Dominicana y Haití, que comparten la isla de Quisqueya”. Su trabajo se basa en la participación “respetando los derechos humanos y el medio ambiente”.

La institución gestiona la comunicación mirando la Isla como un todo. Es decir, se empeñan en canalizar “las inquietudes de los sectores sociales, de la sociedad civil y de organizaciones” de Haití y República Dominicana. Con este método de gestión se pretende “crear un puente de información ágil, actual, imparcial y libre de prejuicios”.

Por ser diferente, espacinsular acarrea contrariedades que pueden llegar a la intolerancia extrema. Algunos sectores se perciben amenazados, debido al compromiso de hacer una comunicación diferente “alterna, de servicio, participativa y democrática”. Si le suman la luchar por “un liderazgo insular que aborde los temas de las relaciones dominico-haitianas” la situación se torna peligrosa. Para ser excluido basta con que hables un lenguaje diferente.

Lo anterior se convierte en la espada de Damocles en el proceso de sostenibilidad financiera del Espacio de Comunicación Insular. La organización brinca los obstáculos o construye puentes para cruzar por encima de ellos. Solo así logran sortear con éxito sorprendente la situación de sobrevivencia. El apoyo decidido de redes solidarias de colaboradores interdisciplinarios y de organizaciones sociales hacen posibles sus logros.

Romper los esquemas del periodismo actual convierten a espacinsular en una organización rara entre los medios locales de comunicación. En consecuencia, se niegan a acogerse a la falsa objetividad o neutralidad periodística. Pues apuestan por “el compromiso por la justicia y los derechos humanos”.

Es muy difícil –así sea un excelente periodista– ser neutros frente a deportaciones crueles y a actos degradantes que rayan en lo inhumano. Ante la degradación del ser, espacinsular da la cara con un periodismo basado en los valores éticos y humanos. Un periodismo ciudadano.

José Luis Soto, periodista y comunicador dominicano, es el fundador y director de espacinsular. Para ser precisos, espacinsular nació el 16 de agosto de 2005. La dirección electrónica –si desean comunicarse– es espacinsular@espacinsular.org

En suma, como se vale soñar, vamos a celebrar por diecisiete años más de comunicación comprometida. Quedan atrás 17 años cumplidos por espacinsular. Apostamos por que los puentes que conectan a Haití con República Dominicana sean innecesarios. El reto es que los puentes sean la conexión de los intereses de los dos Estados, con los intereses de sus ciudadanos respectivos.

Sigamos construyendo puentes de comunicación, puentes de unidad y de diversidad.