El comunicador Pablo Ross abusaba sexualmente de su hijastra, una menor de 16 años, desde el 2014, según el Ministerio Púbico (MP). Esta acusación se hace constar en el expediente de solicitud de medida de coerción contra Ross, a quien la Fiscalía solicitó prisión preventiva.

De acuerdo con el Ministerio Público, las autoridades cuentan con los testimonios de varias personas, entre ellas de la menor, cuyo nombre se omite por razones legales, de la madre y el padre de ésta.

Ayer, la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional aplazó para el próximo martes 25 a las 9:00 de la mañana el conocimiento de medida de coerción al comunicador.

El aplazamiento se debió a que el Ministerio Público solicitó que a la menor de edad se le realice una prueba psicológica, a través de la Cámara Gesell.

Otras dos acusaciones se suman al caso de Pablo Ross, quien fue apresado acusado de abusar sexualmente de su hijastra menor de edad.

Se trata de Carol Pérez y Milagros Beras, quienes acusaron de forma separada al también comunicador y mercadólogo, una de haberla acosado sexualmente y la otra de haberla violentado verbalmente.

Previo a la audiencia, Ross, al ser preguntado sobre su responsabilidad en los hechos, se limitó a responder “la verdad se va a establecer, estamos tranquilos, estamos en paz, estamos cooperando con la justicia (…) hubo un mal entendido”.

Mientras que, su abogado Luis Yépez Suncar, indicó que el Ministerio Público lo que busca es agravar el caso, acusando a su defendido de abuso sexual contra su hijastra.

La Fiscalía asegura que Ross, durante cuatro años, aprovechaba cuando se encontraba a solas con la adolescente para abusar de ella, mientras le decía que sentía envidia del novio de ésta, ya que “tenía lo que él no podía tener”.

Asimismo, indica que el comunicador le decía a la joven que su madre no podía enterarse de lo que sucedía.

El MP cuenta con un informe realizado a la menor en el del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) que “prueba los hechos cometidos por el imputado”. Además de un certificado médico legal, donde consta que la joven presenta himen con desgarros antiguos, entre otros documentos.