Los factores que pudieron haber incidido para que Danilo Medina, pensara primero en él y en su futuro como político y ciudadano, y desistiera de sus aspiraciones para realizar una reforma constitucional que lo habilitara para optar por un nuevo período presidencial:

1. La oposición de Estados Unidos expresada por líderes políticos de Estados Unidos, a través de diversas declaraciones emitidas por los senadores Robert Menéndez, Marcos Rubio y el congresista dominicano en la Cámara de Representantes, Adriano Espaillat y finalmente la llamada del secretario de Estado, Mike Pompeo, quien telefoneó al presidente Medina y conversaron sobre la importancia de que todos los actores políticos en el país preserven las instituciones democráticas y respeten el estado de derecho y la Constitución, en especial las elecciones del 2020.
2. La sistemática y firme oposición al proyecto reeleccionista encabezada por Leonel Fernández, dentro del Partido de la Liberación Dominicana.
3. Con el Partido Revolucionario Moderno a la cabeza, la oposición mantuvo su negativa a la reforma constitucional. Luis Abinader encabezó una concurrida manifestación al frente del Congreso.
4. La oposición de la sociedad civil, que en los últimos días patrocinó multitudinarias manifestaciones en Santiago y en el Distrito Nacional.
5. Las organizaciones empresariales también manifestaron su rechazo al proyecto reeleccionista.

Esta vez se puso en evidencia que para alcanzar la cantidad de votos requeridos era pertinente la compra de diputados y leonelistas y perremeistas tomaron las previsiones para que el proyecto de reforma constitucional “no concitara, con recursos económicos del estado, el apoyo” para ser aprobado en la Asamblea Nacional.

Y por último, Danilo Medina, con su discurso pensó en él y en el futuro y preparó su salida del gobierno, al margen de los seguidores más comprometidos, algunos señalados en supuestos actos de corrupción, de manera que al terminar su mandato, se le garantice volver a la vida civil sin la presión directa de ser acusado de encabezar un gobierno ilegítimo y planteara una problema de gobernabilidad, que pudiera ponerlo en las puertas de los tribunales y en una eventual situación carcelaria, por acusación del uso de los recursos públicos para alcanzar de nuevo la presidencia.